La norma UNE EN ISO 9227 especifica los métodos para realizar pruebas de corrosión en materiales metálicos. Estas pruebas son esenciales para evaluar la resistencia de los metales a la corrosión, asegurando su durabilidad y rendimiento en diversas condiciones ambientales. Desarrollada por la Organización Internacional de Normalización (ISO) y adoptada a nivel europeo (EN) y español (UNE), esta norma es fundamental para industrias que dependen de la integridad y longevidad de los materiales metálicos.
Los principales objetivos de la UNE EN ISO 9227
Se recogen los principios para realizar el ensamblado correcto de todos los equipos de protección individuales contra las caídas y los sistemas que existen para la retención y sujeción del trabajador en el caso de que algo falle, como una cuerda
- Evaluar la Resistencia a la Corrosión: Determinar cómo los materiales metálicos reaccionan a diferentes ambientes corrosivos.
- Garantizar la Durabilidad: Asegurar que los materiales metálicos puedan mantener sus propiedades estructurales y funcionales durante su vida útil esperada.
- Facilitar la Comparación: Proporcionar métodos estandarizados que permitan comparar la resistencia a la corrosión de diferentes materiales y tratamientos superficiales.
- Facilitar la Comparación: Proporcionar métodos estandarizados que permitan comparar la resistencia a la corrosión de diferentes materiales y tratamientos superficiales
Tipos de Pruebas de Corrosión
La UNE EN ISO 9227 describe varios métodos para probar la resistencia a la corrosión, incluyendo:
- Prueba de Niebla Salina Neutra (NSS): Esta prueba expone los materiales metálicos a una atmósfera salina para evaluar su resistencia a la corrosión en ambientes marinos o con alta salinidad.
- Prueba de Niebla Salina Ácida (AASS): Similar a la prueba NSS, pero con un pH más bajo, esta prueba simula condiciones más agresivas y es útil para materiales expuestos a ambientes industriales contaminados.
- Prueba de Niebla Salina Acética-Cobreada (CASS): Utilizada principalmente para evaluar recubrimientos de protección, esta prueba combina sal, ácido acético y cobre para crear un ambiente altamente corrosivo.
En la EN 363 no está definido el sistema de protección individual contra caídas, es decir, no existe un manual con los pasos que se deben seguir para realizarlo correctamente, pero sí y una serie de recomendaciones y ejemplos basados en las buenas prácticas.
Preparación de las Muestras
La norma detalla los procedimientos para preparar las muestras antes de la prueba, incluyendo la limpieza, dimensiones y el montaje adecuado para asegurar resultados reproducibles y comparables.
Condiciones de Prueba
Se especifican las condiciones ambientales bajo las cuales se deben realizar las pruebas, como la temperatura, la humedad, la concentración de la solución salina y la duración de la exposición. Estas condiciones están diseñadas para replicar de manera realista los entornos corrosivos que los materiales encontrarán en su uso práctico.
Evaluación de Resultados
La UNE EN ISO 9227 proporciona criterios para evaluar los resultados de las pruebas de corrosión. Esto incluye la inspección visual de las muestras, la medición de la pérdida de masa, y otros métodos para cuantificar el daño por corrosión. Estos criterios permiten determinar la eficacia de los tratamientos protectores y la resistencia inherente de los materiales.
Un sistema de protección individual para protegerse de las caídas tiene que estar formado por un dispositivo que ejerza presión en el cuerpo, que a su vez esté enganchado a un punto de anclaje seguro. Para ello, se pueden utilizar sistemas de conexión con uno o varios componentes, como: amarres, conectores, dispositivos de anclaje, dispositivos anticaídas, etc.
